un pedacito de Carpe Diem.

La lluvia. Las gotas caen por la ventana como pequeños cristales. Parece que quieren decir algo. Tal vez muestran la tristeza del día. Quizás el recorrido que hacen, que cuando una gota desaparece por debajo del cristal enseguida aparece otra que la sustituye, se podría equiparar a la vida misma. Las personas entran y salen de nuestra vida como haces de luz. El brillo de algunas hace que otras se sientan iluminadas durante un tiempo. Pocas son capaces de mantener ese brillo. La mayoría más pronto que tarde se oscurecen. Muchas veces miramos demasiado a esa oscuridad que ha dejado la estrella fugaz tras su paso, sin tener en cuenta que ha aparecido otra que, ¿quién sabe? a lo mejor sí, es una de las estrellas que se quedan para siempre en el cielo. Así que de nuevo vuelve a aparecer esa estrella que aunque quizá sea efímera, parece que nunca se va a ir. Que siempre se quedará ahí arriba para iluminarte.  Debes saber que el tiempo no se recupera, se te escapa de las manos y no vuelve. Date la oportunidad de ser feliz. Date un paseo por la playa de noche sin mirar atrás.  


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*Lara