Tengo una amiga a la que enseñaron que no pasa nada si tienes una mala racha, porque eso significa que dentro de poco comenzarán a pasar cosas buenas. Cuando tocas fondo, sólo queda subir y subir hasta salir a la superficie. Lo difícil es que te falta el aire. De poco sirve echar en cara las cosas, o echar balones fuera eximiéndose de culpabilidad. Hay cosas que pasan porque tienen que pasar, y punto. Y hay cosas que pasan como consecuencia de tus actos. Lo malo es que cuando todas esas cosas te pasan a la vez parece una jugarreta del destino. Y, a lo mejor es así, porque en ocasiones nos quiera dar un escarmiento. Una lección para espabilar, para encararse a los problemas para resolverlos. Claro, resolver aquellos problemas susceptibles de resolución. Hay problemas que vienen y que no tienen remedio. Que hay que aceptarlos. "El café se enfría el cigarro se apaga, el tiempo pasa y las personas cambian". Pero, ¿sabéis qué? Una de las personas más sabias e importantes de este mundo me ha dado un consejo, siempre siguiendo de ejemplo... "No hay que rendirse ¿eh? Y ahora más que nunca, no te puedes acoquinar, las cosas hay que lucharlas"
Lar
Qué razón!!!!! ^^
ResponderEliminarSe quiera o no, hay que luchar!!!
Un beso! ;)
http://myworldlai.blogspot.com.es/
Qué bueno que ya regresaste! Ya estaba desilusionado porque nk escribías.
ResponderEliminarse nota el lenguaje jurídico ;)
ResponderEliminary qué razón más grande tienes aquí... como un piano!