Pato pato pato pato.

Pato pato pato pato.

Hablo de originalidad. De personalizar tu blog, por supuesto. De extraer de aquí y de allí ideas, frases y textos. Pero de decir de dónde provienen, o distinguir claramente qué es producto de tu inteligente cabecita o copia manifiesta de otras cabecitas que, habiéndote gustado, republicas. O, al menos, aún con esas, de no dárselas de auténtica. De entradas idénticas, sin cambiar siquiera la foto. Y de textos propios, que te encuentras en cualquier birria de blog de quinceañera. Y a todo esto, me gustaría traer a colación un tema muy interesante, y que con internet está adquiriendo bastante importancia. Es la propiedad intelectual, y lo que nos ataña concretamente: los derechos de autor. Podéis ir aquí para ver el Real Decreto Legislativo 1/1996, que lo protege, y  aquí  su posterior modificación con la Ley 23/2006. Y aquí la ampliación en el Real Decreto de 2011.  Dicho esto, sabiendo que no os vais a leer todo lo que en el BOE aparece, puedo señalar como relevantes para que os miréis por encima:  arts 3, 4, 6.1, 10.1a), 10.1h), el artículo 14 en todos sus puntos, arts 17, 18 y 19. Recalcar el 20, (que quiere decir que  la explotación no podrá ser realizada sin autorización, ni siquiera en los casos de comunicación pública). Y si queréis acongojaros, leed del 138 en adelante. Esto es simplemente como advertencia. Para que sepáis que no es que únicamente esté moralmente rechazado(que es lo que a lo que yo voy), sino que se encuentra sancionado civil y penalmente. Y ahora es cuando hablo con la gente de lo interesante que es el Derecho Mercantil y lo útil que resulta en la práctica, no como el Internacional. Y de que me da igual que se publiquen textos de mi puño y letra siempre y cuando se me haga referencia expresa. Y de que, en definitiva, estoy harta de que blogger se haya convertido (haciendo honor a una expresión de mi abuelo) en una casa de putas. De copias continuas, de diseños cutres, de frases hechas y de femmes fatales que se saltaron la época de las barbies. Y con esto y un bizcocho, quienes se hayan sentido identificados pues… que se descarguen el Pou.  Ale. Ata luego. 

Lara