lunes

El silencio es el grito más fuerte.


—¡Buenos días princesa!
Pero es increíble, dame una explicación.
Tú tienes que darme una explicación. Perdona, ¿eh? Me acerco hacia un granero y me caes entre los brazos del cielo, caigo de la bicicleta y me encuentro entre tus brazos, hago una inspección en la escuela y te vuelvo a encontrar de nuevo delante de mí. Y apareces siempre en mis sueños... ¡Pero quieres dejarme en paz! Al parecer te has vuelto completamente loca por mí, ¿eh ? Está bien, lo comprendo, pero, pero... Está bien, tendré que ceder, ¡HAS GANADO! ¿Dónde vamos princesa? ¿Al mar? ¿Te gusta el mar?


La vida es bella

viernes

Compañeros hay muchos, verdaderos amigos sólo son unos pocos.

-de historias de esas-

cuando llega ese día en que sientes que estás cansado Sabes que te estás empezando a hacer mayor 
de las despedidas y de perder gente que quieres. 
Creo que ese momento ya ha llegado. 

jueves

Te crees león, por ser el rey de los gatos.

Refugiándose en una calada y buscando siempre en la nicotina la compañía que no encuentra con la gente, levanta la mirada para comprobar que hay luna llena. Apaga el cigarro y se dispone a entrar. La altura de los tacones junto con la colocación de su falda muestra como interminables sus piernas. Pide lo de siempre, su vodka polaco clásico con arándanos. Agarra la copa antes de que haya dado tiempo a que salga el anhídrido carbónico, y la posa delante del camarero, a quien le dedica una picaresca sonrisa. Una vez servida, se dirige hierática hacia los sillones con ella en mano. Tiene la mirada fija en ninguna parte y a la vez está pendiente de todo movimiento. Habiendo luchado tantas veces contra fieras ha llegado a sentir que su vida era una guerra. La verdad es que no he visto luchadora igual. Ahora, se limita a beber hasta estar suficiente ebria como para olvidarse de esas batallas perdidas, como para abrir fuego contra algún halcón de entre los buitres negros que la rodean. Sólo la queda fijar objetivo y empezar a aullar, en su eterno afán de encontrar nuevas víctimas.

Lara

miércoles

Espero que me perdones porque yo no puedo perdonarme.


Click, entre la neblina. 
Y recuerda su olor
Hay una antigua leyenda china sobre el hilo rojo del destino. Dice que los dioses han atado un hilo rojo alrededor de cada uno de nuestros tobillos y los han unido a las personas cuya vida estamos destinados a tocar. Puede que este hilo se alargue o se enrede, pero nunca se romperá.
Touch

martes

Una persona cambia por dos razones: aprendió demasiado o sufrió lo suficiente.

- Dicen que sabes distinguir un día lluvioso iluminado de un día de sol tormentoso, las palabras de los hechos y los ojos de las miradas. Que sabes intercambiar silencios y sonrisas llenos de contenido. También que puedes diferenciar una rabieta de una gota que colma el vaso, y un mal día de estar a una lágrima de deshidratarte. Que consigues sintetizar sentimientos y medir con cuentagotas la paciencia, así como parar el tiempo en una caricia. Comentan que a la alarma del reloj ya no la haces más caso que a las pesadillas, ni la oscuridad evita que te desveles. Que el coche te hace viajar más lejos que los sueños y que pesa el doble la desconfianza que sus ojos, y la indiferencia que la simulación de atención.  Que eres consciente de que si quieres seguir andando tienes que deshacerte de algo, que la maleta ya desequilibra demasiado. Y que debes cambiar eso de que la seguridad sólo te la logre dar una copa de vodka entre luces y ruido. Dicen también que tienes que dejar de discutir contigo misma, que no vale que tú seas  tu enemiga. Ah. Lo más importante. Dicen que recuerdes aquello que tantas veces has aconsejado: "Nunca más, nadie más". 
Lara